2018 puede ser un año en el que mejores en el amor, la economía y conozcas otros horizontes
Por Diego Rodríguez
Si este año no fue el mejor para ti, tuviste fracasos amorosos, tropiezos económicos, problemas laborales, quizá el último día del año pasado no realizaste algún ritual para empezar con el pie derecho 2017, por lo que aquí te presentamos algunos ritos que debes realizar para que 2018 lo empieces con Tokio.
Para atraer la prosperidad y el dinero a tu vida, se cree que en la medianoche del 31 de diciembre debes barrer tu casa con la puerta abierta para despojarte de las malas vibras, así como poner monedas en el piso fuera de tu casa y barrerlas hacia el interior para tener estabilidad económica.
También puedes usar velas de diferentes colores para conseguir lo que quieres, según los estudiosos de las ciencias místicas, las velas rojas atraen al amor; las amarillas ayudan a que la abundancia te acompañe; las rojas empatan con la armonía y las naranjas atraen el éxito.
Una de las creencias más populares es usar ropa interior de un color determinado, la ropa amarilla se asocia con la felicidad. Si crees que tu destino es quedarte a vestir santos, puedes darle un giro a esta situación, lo que se recomienda es usar ropa roja, para que el amor toque a tu puerta.
Ahora que si tu deseo es cambiar de empleo o conseguirlo por primera vez, los especialistas en el esoterismo recomiendan que uses tres hojas de laurel en tu zapato durante el 31 de diciembre, ya el 1 de enero las debes sacar de tu zapato y quemarlas.
Comer 12 uvas y lentejas es también uno de los elementos más conocidos, las uvas las debes consumir en los últimos instantes de este año, con cada una pides un deseo que se te cumplirá por cada mes de 2018. Las lentejas son para tener 365 días de abundancia económica y crecimiento.
Y bueno, si lo tuyo es andar de pata de perro, de trotamundos, alista tus maletas y en los primeros minutos de 2018 sal con ellas y camina un poco por tu colonia, con esto atraerás energías que te impulsarán a conocer más lugares.
