La reencarnación es una creencia que se desarrolla a partir de la muerte de una persona. Ésta dice que al momento de morir, el alma se separa momentáneamente del cuerpo para tomar un cuerpo diferente y encarnar en un ser distinto.
El concepto de reencarnación comenzó cuando en la India, los hombres primitivos intuyeron que si la luna y el sol regresaban al amanecer, el hombre, al momento de su muerte, debía regresar.
Cuando apareció el Budismo en la India, adoptó la creencia y poco a poco se fue extendiendo en China, Japón, el Tíbet y más tarde en Grecia y Roma.
A lo largo de su existencia, diferentes religiones han adoptado una manera propia de creer en la reencarnación. Aquí te presentamos algunas:
Hinduismo: Esta religión plantea que al momento de la muerte, el alma o parte esencial abandona el cuerpo y es arrastrada por los mensajeros del dios Iamaraya para ser juzgada y dependiendo de las acciones buenas o malas, el alma se reencarna en una existencia superior, intermedia o inferior.
Jainismo: Surgió al mismo tiempo que el budismo, y habla de que al morir, las almas van recogiendo los frutos de sus buenas o malas acciones a través de sus vidas. Al momento de acumular suficiente buen karma, la pureza de su alma hará a la persona reencarnar en una entidad semi-divina.
Sikhismo: La reencarnación es la creencia central de esta religión, pues creen que el alma tiene que transmigrar de un cuerpo a otro como parte de su evolución, si uno no realiza buenas acciones el alma se reencarnará por siempre.
Budismo: Tiene una noción distinta de la religión, pues niega el hecho de que el individuo pueda reencarnar en alma, mente o espíritu, pero afirma que cuando una persona muere, aparece una nueva en función de las acciones del anterior.
Shinto: Tiene presente la noción de la reencarnación en forma de espíritus, habla acerca de que cada individuo se convierte en Kami, seres que se reencarnan con misiones diversas.