Considera las características del lugar donde los quieres colocar para que duren más
Hay distintos tipos de muebles para jardín, tanto en diseño como en los materiales que se usan para fabricarlos, así que debes considerar el lugar en donde los colocarás, si les dará la luz del sol de manera directa, condiciones climáticas o el tipo de uso que se les dará.
Algunos de los más comunes son los de fibras sintéticas, la mayoría de ellos mantienen una relación entre calidad y precio, con diseños innovadores y que imitan a las fibras naturales, pero que tiene mayor resistencia al sol, humedad y viento. Además, por los materiales con los que están hechos, se pueden limpiar fácilmente.
En el caso de los de fibras naturales, como el mimbre, bambú o ratán, que también se pueden usar en interiores o exteriores, dan un toque rústico a los espacios; sin embargo, el clima los afecta más rápido, además de ser más caros que los anteriores y necesitar más cuidados.
También hay muebles de aluminio, que tiene un aspecto sencillo, su principal ventaja es la durabilidad, que no se oxidan fácilmente y pueden permanecer en el exterior sin problemas, se pueden combinar con diferentes fibras sintéticas sin incrementar su peso de manera considerable y son fáciles de dar mantenimiento.
Otra de las opciones que pueden encontrar en el mercado son los muebles de plástico, que pueden tener diseños llamativos y tener alguna tela o cojín que los hagan más cómodos, son de los materiales más baratos, su mantenimiento es fácil, pero son de los muebles menos resistentes y que pueden también sufrir los daños del ambiente de manera más rápida.
Con en varios temas de decoración, siempre es importante buscar varias opciones para que sepas cuál es la que más te conviene, así como las características de los lugares que quieres decorar para que luzcan más tus espacios.