Las figuras geométricas sirven para relajar la mente y armonizar el espacio más importante de tu casa
Los mandalas son figuras que se caracterizan por armonizar el ambiente de todos aquellos lugares donde son colocados, además de brindar relajación a las personas que las observen, ya que son un centro de energía que balancea y purifica, según la cultura oriental.
Utilizar mandalas como decoración en la habitación podría ayudarte a tener un espacio conectado con tu ser, para que cada que lo observes te sientas en un espacio único y original; además, podrás elegir el color adecuado que resalte la pintura de tu cuarto.
De acuerdo con diseñadores, la belleza y fuerza de estas figuras levantan la energía deprimida de inmediato, esto se debe a las formas geométricas, entre círculos, triángulos, cuadrados y rectángulos, las cuales al ser vistas poseen una energía estable y armónica, que generalmente contienen la representación de todos los elementos de la naturaleza.
También, expertos del mundo espiritual consideran que el mandala puede ser una guía para ubicar el centro más profundo de un ser y de esa manera integrar los diferentes aspectos de la vida.
Según el diseño y los colores que la compongan, es que estas imágenes toman un significado y logran ser propicias para lograr la relajación, favorecer la concentración y activar aspiraciones.
Hay muchas opciones para tener un mandala en tu cuarto: podrías pintarla sobre la pared, utilizar cobijas alusivas, tapetes, cuadros, almohadas o incluso pequeños accesorios.