Ya que se consume gran cantidad de agua, te decimos cómo evitar desperdicios
Hay actividades en el hogar que inevitablemente se deben realizar de manera periódica; lavar la ropa es una de éstas.
Al lavar, se consume una gran cantidad de electricidad, y es junto con el refrigerador y la televisión, uno de los electrodomésticos que consume mayor energía. Sin embargo, siguiendo algunas ideas simples que no causarán muchos cambios en tus tareas regulares de lavado es posible reducir no solo el impacto ecológico que causan, sino también el impacto en tu bolsillo.
- Aprovecha cada carga: Lava cuando haya suficiente ropa para llenar tú lavadora.
- Usa jabón líquido: hacen trabajar menos a las lavadoras.
- Utiliza el ciclo de agua fría: Gran parte de la energía que utiliza una lavadora, entre 80 y 85%, la utiliza para calentar el agua, por lo que es muy importante lavar, siempre que se pueda, con los programas de temperaturas bajas.
- Evita el uso de la secadora: Limita su uso a casos de urgencia y en la medida de lo posible sustitúyelo por un centrifugado de alta velocidad.
- Enjuaga el filtro periódicamente: Permite optimizar el rendimiento de la lavadora e incluso prolonga su vida útil.
- Elige la lavadora adecuada: Fíjate en la etiqueta a qué categoría de eficiencia energética pertenece (de la A a la G). Se aconsejan las A ya que emiten menos CO2 y ahorran durante su vida útil.
TIP EN VERDE: ¿Sabías que puedes colocar las sábanas en tu cama cuando aún están mojadas? Suena un poco extraño pero las sábanas de algodón son telas delgadas y se secan muy rápido si se les deja descubiertas.