Hanae Pacheco Cervantes

El papel tapiz es un elemento decorativo para muebles y paredes que ofrece muchas alternativas, tanto en diseño como en material, a continuación, te mostramos algunas ideas que puedes considerar si estás pensando en darle un cambio a tu hogar

Existen tapices hechos de papel normal, ideal para cuando te gusta cambiar la decoración con frecuencia, pues dura sólo un par de años; si se coloca en la pared puedes reforzarlo con una capa de polivilino para endurecerlo y que así sea lavable, además de elegir papel resistente a la luz para que no se gaste tan rápido.

Otros cuentan ya con una capa de vinilo, lo que los vuelve resistentes al calor, la humedad y las manchas.

Los tapices de estuco y espumante vinílico tienen la misma composición que el papel vinílico, pero son más fuertes, resistentes y duraderos, además de que el segundo cuenta con acabados que imitan la pintura al óleo.

El más resistente es el de papel japonés, que tienen un fino trenzado similar al de las canastas; los tapices de papel de tela están hechos en un soporte de papel que va cubierto con una capa de tela, algunos tienen una capa de espuma entre estos dos lo que los convierte en aislantes del ruido y la humedad.

También hay tapices de papel de corcho, son finas láminas de corcho que se adhiere al papel y son muy resistentes a la humedad.

Una vez que decidas el material que más se acomode a tus necesidades puedes buscar el diseño de papel tapiz que más vaya con tu decoración, puedes colocarlo sobre algún muro completo, en un área específica o incluso como cuadros decorativos.